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El gran ejemplo de Málaga señala el futuro de la supervivencia del toreo en estos momentos difíciles. Es la norma que debería generalizarse en todas las plazas de primera.Garantizar el espectáculo es la prioridad.
Den calidad y autenticidad a precios aceptables y la combinación de toros de verdad y verdaderos toreros llevará otra vez a la tauromaquia a un puesto mágico.
El toreo futuro es Málaga
Ricardo Díaz-Manresa
No me puedo callar. Hemos encontrado alguien muy sensato en el toreo, que reconoce la realidad y pone remedio para que haya futuro. Ha sucedido en Málaga. El toreo es Málaga. Nos da el gran ejemplo Málaga. Y tenemos que imitar a Málaga.
Lo más importante, con serlo, no es la corrida de único espada en la Maestranza en la que Manzanares suscitó la polémica pero fue a jugársela. Ni la Puerta del Príncipe, la octava, de Diego Ventura, también en actuación única de rejoneador. Ni la sensacional media de Morante en la de abril y su manejo del capote exprimiendo toros, sobre todo a su segundo. No. Esto hace muchísima falta, pero en lo otro encontramos la supervivencia. El toreo está en Málaga. Y estará.
Lo de la Diputación de Málaga, propietaria del coso, es una revolución. O no. Es darse cuenta de dónde estamos y lo que nos jugamos. Presenta un pliego de lo más sensato con toda clase de detalles para la promoción, que no voy a repetir, pero sí aplaudir los más interesantes o…razonables.
El cuñado Valencia dijo que los toreros no aceptan la realidad al anunciar que en Sevilla habían perdido 96.000 en Resurrección tras agotar las localidades. Málaga sí la acepta. Valencia ciudad no quiso reducir festejos y –ya vieron el resultado- se equivocó cuando esta vez Casas tenía razón. Sevilla ha subido los precios y la sombra alta –grada pura y dura, señor, grada- vale 73 €… Málaga acepta la reducción de festejos, baja el precio de las entradas, pide un canon del 5% de los ingresos en taquilla (si hay dinero, lo hay para todos y, si no, pues a esperar) y se cuida mucho a mayores, jóvenes y desempleados, además de otras medidas promocionadoras para aumentar la afición y el futuro de la tauromaquia.
Por eso, con ser protagonistas, y mucho, Manzanares, Ventura y Morante sobre el albero de la Maestranza, la gran figura de hoy es Málaga preparando su feria de agosto y su temporada entera hasta el 2016, con dos prórrogas si la cosa va bien.
Granada y Córdoba presentan buenas ferias, muy cuidadas, buscando la calidad y…reduciendo festejos. Ese es el camino : presentar atractivos con precios asequibles hasta donde se pueda. Y ahí tienen que entrar las figuras : llevarse lo que generan, no lo que se creen. Patón, en su Castellón a la baja y en números rojos, se quedó de piedra con lo que le pedía Morante (y le recordó la entrada que hubo en el 2012 con un cartelazo porque el de la Puebla iba bien acompañado) y el apoderado de Talavante, Erice, ni se atrevió a comunicarle las exigencia de su torero.
El camino es el de Málaga. Por eso me alegro y lo canto. Vieron que hay que cambiar. Si no, esto se derrumba. Apriétense las empresas los presupuestos y los toreros los machos y esto volverá a caminar. Den calidad y autenticidad a precios aceptables y la combinación de toros de verdad y verdaderos toreros llevará otra vez a la tauromaquia a un puesto mágico. Es fundamental la autenticidad del espectáculo. Si no, cuidado, que se derrumba. Incluso en Málaga.
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