El novillero Ismael Cuevas ha sido intervenido con éxito en el Hospital Carlos Haya de Málaga de la fractura de la vértebra C7 que sufrió al ser cogido por un toro que toreaba a puerta cerrada. La operación, que ha durado nueve horas, ha sido todo un éxito y ha consistido según su padre Antonio Cuevas, en "extraer una parte del hueso de la cadera para hacer un injerto entre las vértebras C6 y C7. Para ello le han abierto la espalda. Luego ha habido una segunda intervención en el cuello para colocar unas placas de anclaje y alinearle la columna vertebral".
Los médicos han salido contentos de la intervención y le han confesado al padre que "Ismael podrá hacer vida normal, podrá caminar aunque todo depende de la recuperación, todavía es pronto para saber si se vestirá de luces o no. Yo creo que sí, que lo volveremos a ver vestido de torero porque tiene mucha raza", afirma Antonio.
Ismael Cuevas ha sido trasladado a la UCI donde deberá permanecer al menos 48 horas. "Los médicos dicen que cuando despierte se notará menos sensibilidad, pero que es algo normal. Deberán pasar dos días para comenzar a ver los resultados", asegura el padre, que lloraba de felicidad ante la llamada de APLAUSOS: "Estoy muy feliz porque veo luz en este calvario que hemos pasado. Nos dijeron en un primer momento que tenía la médula seccionada, que se iba a quedar parapléjico y ahora me dicen que va a poder andar. Estamos muy contentos, se engañaron los médicos esta vez para bien".
Aplausos. Foto: Joaquin Bueno
Los médicos han salido contentos de la intervención y le han confesado al padre que "Ismael podrá hacer vida normal, podrá caminar aunque todo depende de la recuperación, todavía es pronto para saber si se vestirá de luces o no. Yo creo que sí, que lo volveremos a ver vestido de torero porque tiene mucha raza", afirma Antonio.
Ismael Cuevas ha sido trasladado a la UCI donde deberá permanecer al menos 48 horas. "Los médicos dicen que cuando despierte se notará menos sensibilidad, pero que es algo normal. Deberán pasar dos días para comenzar a ver los resultados", asegura el padre, que lloraba de felicidad ante la llamada de APLAUSOS: "Estoy muy feliz porque veo luz en este calvario que hemos pasado. Nos dijeron en un primer momento que tenía la médula seccionada, que se iba a quedar parapléjico y ahora me dicen que va a poder andar. Estamos muy contentos, se engañaron los médicos esta vez para bien".
Aplausos. Foto: Joaquin Bueno
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