Antonio Valero “Valerito” fue un torero de calidad con una acusada personalidad tocada por la varita mágica del arte, y personalmente un hombre entrañable. Desde Cándido Martínez “Mancheguito”, que gozo de notable cartel en Madrid, hubo en la capital manchega un interregno de abulia en lo taurino, que rompieron todos los mencionados y algunos más que dieron paso a un Albacete como ciudad eminentemente taurina, que tuvo como estrellas principalísimas a Dámaso González, Manuel Amador y luego a Sebastián Cortés y Manuel Caballero.
El Albacete taurino despide con Valerito a uno de los personajes más emblemáticos del toreo albaceteño. El más sincero pésame a su esposa, hijos y hermanos. D. E. P.
Informa Aplausos.es
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