El diestro murciano Rafaelillo fajándose por bajo con uno de sus miuras/Fotografría de López-Matito-La Razón/
¡Eran Miuras!
Por Juan Manuel Albendea Sevilla, lunes, 30 de abril de 2012
¿Cuántas corridas de Miura torearán este año las figuras? Seguro que ninguna. Igual que el año pasado y el anterior. Sin embargo, las figuras de la Edad de Oro del Toreo, enfrentarse a esa divisa era muy frecuenta y además motivo de orgullo. Joselito el Gallo –cuyo centenario de la alternativa celebramos este año- toreó en los ocho años que actuó como matador de toros cuarenta y tres corridas de Miura, una media de más de cinco cada temporada. Juan Belmonte, cuarenta y dos y Rafael El Gallo, con toda su fama de supersticioso treinta y tres. Pero nos podemos remontar a épocas más recientes y figuras de nuestra postguerra como Manolete –que perdió la vida con Islero de esa divisa- o Pepe Luis Vázquez o Domingo Ortega, toreaban todos los años alguna corrida de Miura.
Ayer tuvimos tres matadores de toros que estuvieron hechos unos jabatos con cinco toros de la divisa verde y grana. Ayer los seis salieron sin su divisa como señal de luto por el reciente fallecimiento de la madre (q.e.p.d) de los actuales ganaderos. El tercero fue devuelto a los corrales por inválido y el sobrero era del Conde de la Maza, que tampoco es ganadería apreciada por las figuras. La corrida estuvo muy bien presentada y eran unos ejemplares cárdenos, de diferente intensidad, preciosos. Varios fueron ovacionados de salida. Los tres toreros estuvieron con ganas de agradar, pero, por eso he empezado a hablar de las figuras, no es lo mismo unos toros con las dificultades que sacaron que lo lidie un torero que torea ochenta corridas al año que uno como José Luis Moreno que toreo cuatro veces el año pasado.
Ha sido volteado dos veces, afortunadamente, sin consecuencias. En ambos toros ha saludado desde los medios. El murciano Rafaelillo ha luchado con las dificultades de sus enemigos hasta la extenuación, con un gran valor y, con mérito ha dado la vuelta al ruedo, que se hubiera convertido en oreja si no llega a pinchar antes de cobrar una estocada caída. Un vecino grita: “Rafaelillo tienes dos co….” El catalán Serafín Marín ha peleado con tesón con el del Conde de la Maza que tenía muchas dificultades así como el sexto de Miura al que mató de una estocada casi entera. Un espontáneo –algo insólito en estos tiempos- pero además salió sin muleta, con una blusa. Un loco. Menos mal que lo retiraron enseguida.
Ayer tuvimos tres matadores de toros que estuvieron hechos unos jabatos con cinco toros de la divisa verde y grana. Ayer los seis salieron sin su divisa como señal de luto por el reciente fallecimiento de la madre (q.e.p.d) de los actuales ganaderos. El tercero fue devuelto a los corrales por inválido y el sobrero era del Conde de la Maza, que tampoco es ganadería apreciada por las figuras. La corrida estuvo muy bien presentada y eran unos ejemplares cárdenos, de diferente intensidad, preciosos. Varios fueron ovacionados de salida. Los tres toreros estuvieron con ganas de agradar, pero, por eso he empezado a hablar de las figuras, no es lo mismo unos toros con las dificultades que sacaron que lo lidie un torero que torea ochenta corridas al año que uno como José Luis Moreno que toreo cuatro veces el año pasado.
Ha sido volteado dos veces, afortunadamente, sin consecuencias. En ambos toros ha saludado desde los medios. El murciano Rafaelillo ha luchado con las dificultades de sus enemigos hasta la extenuación, con un gran valor y, con mérito ha dado la vuelta al ruedo, que se hubiera convertido en oreja si no llega a pinchar antes de cobrar una estocada caída. Un vecino grita: “Rafaelillo tienes dos co….” El catalán Serafín Marín ha peleado con tesón con el del Conde de la Maza que tenía muchas dificultades así como el sexto de Miura al que mató de una estocada casi entera. Un espontáneo –algo insólito en estos tiempos- pero además salió sin muleta, con una blusa. Un loco. Menos mal que lo retiraron enseguida.
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