EL VITI, TORERÍA Y BONDAD.

S.M. "EL VITI"

SANTIAGO MARTIN "EL VITI"

Por Juan Miguel Núñez Batlles

El Viti ha vuelto a triunfar en Madrid. Cuarenta años después de su último paseíllo en Las Ventas, la plaza donde su nombre fue referencia de una época de grandes toreros; y donde batió todos los récords, sin que nadie hasta ahora haya podido arrebatárselos: dieciséis Puertas Grandes -dos de ellas como novillero- a lo largo de su importantísima carrera en los ruedos.

Y Madrid se lo ha recordado estos días con una magna exposición que ha venido a rendir homenaje a su figura. Gran figura en las décadas sesenta y setenta del pasado siglo, que fue estandarte del toreo castellano.

El propio Viti -Santiago Martín-, acompañado de su esposa Carmen García Cobaleda, y sus hijos, presidió el día 30 de junio, jueves, la inauguración de la muestra. Un acto multitudinario, pero sobre todo, emotivo y lleno de felicidad, en el que su estampa solemne, de hombre bueno y extraordinario torero, ha vuelto a cautivar a la más exigente de todas las aficiones, el púbico de Madrid.

Con él, ese día, estuvo todo el toreo. Una lista interminable de matadores de toros -de su época y más recientes-, ganaderos y otros estamentos. Políticos también, con el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, encabezando una nutrida representación de su amada tierra.

Un día muy especial para todos los que amamos el toreo a través de sus grandes artífices. Y no sé si valdría citar algunas de sus reflexiones en voz alta sobre esta actividad y la vida misma, para entender ahora mucho mejor su magisterio en los ruedos y fuera de ellos. O quizás habría que referirse a la cordialidad de su trato, la solemnidad de su porte, y hasta el temple y la sensibilidad de su gesto y su palabra Y tanto bueno que emana de su deslumbrante figura.

El Viti es único. Y tanto, que ya no hay datos nuevos para descubrirlo. De siempre: Santiago Martín "El Viti", gran compendio de humanidad y torería.

En la exposición, que estuvo organizada por el Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid, y que se ha podido visitar en la Sala Antonio Bienvenida de la Plaza Monumental, hasta el pasado viernes, día 7, se recogían muchos datos, documentos, libros y fotografías, crónicas, carteles y premios. Mil objetos de su triunfal carrera. Piezas muy especiales, muchas de ellas cedidas para la ocasión por el Museo Taurino de Salamanca.

Ha sido ésta la muestra de una historia, la de El Viti, que tiene un poso de inabarcable apoteósis, en los ruedos como torero, y en la calle como hombre.